¿Cómo es el Cuento del Caguán?

Llevo más de quince años ignorando la carrera política de Ingrid Bethancourt y lo he logrado casi a la perfección. Nunca me han interesado sus pronunciamientos políticos, nunca se me pasó por la cabeza votar por ella. Como persona, me parece horripilante el drama humano que vivió y me alegra mucho que haya sido liberada. Pero como política me tiene absolutamente sin cuidado. Ayer tuve una pequeña caída en mi esfuerzo sistemático de ignorarla y terminé viendo un fragmento de su entrevista con Arizmendi.




La verdad me da una pereza infinita referirme al cuento de su demanda-que-no-es-demanda al Estado. Pero en la entrevista dijo una cosa que sí me llamó la atención y que no tiene nada que ver con ella, razón por la cual muy seguramente pasará desapercibida. Cuando explicó sus razones para ir a San Vicente del Caguán dijo que el alcalde de la zona le había pedido que fuera porque la gente tenía miedo, en especial miedo de que, en sus palabras, "les cobraran el haber estado en la zona de despeje" (más o menos, también me da pereza buscar la cita textual).

¡Un momento! ¡Corten! ¡Paren la entrevista! ¿Me puede repetir esto doña Ingrid? Veamos: el gobierno colombiano declara a San Vicente del Caguán "zona de despeje" y luego, por razones de todos conocidas, decide remilitarizarla. Ante este hecho la gente de la zona reacciona con miedo. ¿Miedo de quién? Supone uno, porque no hay de otra, que miedo del Ejército. Repitamos esto despacio: la gente de un municipio de Colombia, desmilitarizado por el gobierno colombiano mediante una decisión autónoma, siente miedo, aparentemente, del Ejército legalmente constituído.

Como a mi me tiene sin cuidado lo que pase con Ingrid, si yo hubiera sido Arizmendi le hubiera preguntado sobre este asunto. ¿Exactamente de qué tiene miedo la población de San Vicente? ¿Temen retaliaciones del Ejército? Si esto es así, es de suponer que la población tiene alguna base racional para dicho temor, ¿cuál es? ¿Es que ha habido en el pasado represalias indebidas del Ejército contra la población de la zona, presumiblemente antes del despeje? Si la gente de las zonas de violencia tiene esta reacción, ¿no será que la labor de contrainsurgencia del Estado no es tan ascéptica como nos la presenta el gobierno? ¿tendremos los colombianos de las ciudades la información necesaria sobre la situación de derechos humanos en zonas de guerra para evaluar lo que está haciendo el gobierno?

(Para que conste, yo no creo que el Ejército sea un violador sistemático de los derechos humanos. Hay zonas del país donde el Ejército ha cumplido con su función honorablemente. Pero no todas...)

En fin, son preguntas que me surgieron al oír a Ingrid. Pero a juzgar por la entrevista, la gente quiere saber más sobre Ingrid, así sea a expensas de saber más sobre San Vicente del Caguán.